¿Cuál es mi proposito?

 " Ve a tu casa y a tu familia y diles todo lo que el Señor ha hecho por ti y lo misericordioso que ha sido contigo" 

Para los que no conocen este versículo, es en contexto de cuando Jesus libera al endemoniado llamado "Legión, porque somos muchos". 

Una vez libre y completamente en si, el hombre le insiste a Jesus para que lo deje acompañarlo, pero Jesus le dice que no, específicamente le dice que vuelva a su casa y cuente lo que ha pasado.

Muchas veces me he preguntado cual era mi propósito en esta vida nueva en cristo, las naciones? las misiones? África? Siempre mi mente me llevo a pensar cosas mas grandes que yo, la soñadora jaja 

Pero al pensar asi, muchas veces no apreciaba mi presente. Ya queremos saltar a una aventura nueva. Pero olvidamos que hemos sido llamados a arrepentirnos de nuestros pecados y volver a Dios, demostrándolo con nuestra forma de vivir: amando a Dios y amando a nuestro prójimo como a nosotros mismos. 

Entonces, ¿ como hacemos la voluntad de Dios en nuestras vidas? 

Simple, amando a Dios y a nuestro prójimo donde sea que estemos y donde sea que Dios nos lleve. Él se encarga de poner a las personas correctas en nuestros caminos para compartir nuestro testimonio y lo bueno que ha sido con nosotros.

Podemos tener un trabajo poco visible, que no tenga nada que ver con la iglesia, podemos ser amas de casa, jubilados, maestras, trabajar en finanzas pero sea donde sea que estemos, obedezcamos a Dios. 

Juan el bautista les dijo a las multitudes " si tienes dos camisas, da una a los pobres, si tienes comida, comparte con los que tienen hambre." A los cobradores de impuestos les dijo " no recauden mas impuestos de lo que el gobierno requiere" y a los soldados " no extorsionen ni hagan falsas acusaciones y estén satisfechos con sus salarios".

Si no tenemos un llamado en especifico y nos sentimos perdidos con respecto a nuestro propósito en Dios, no nos frustremos, donde sea que estemos seamos obedientes porque cada cosa que sembremos vamos a cosechar a su debido tiempo. Seamos fieles en el desierto, en la espera, en lo cotidiano y veremos tarde o temprano como Dios nos va llevando a cumplir su o sus propósitos.